Fic de... mmm... ¡Meh!

Si, si, lo sé. Soy la mejor poniendo títulos. Como me he puesto yo una orden/nota mental en mi cabeza para no abandonar esto y subir por lo menos algo cada dos o tres días. Y he dicho, mm... Llevo dos días sin conectarme apenas pues no sé que podría subir. Pero claro he recordado que podía subir los últimos deberes que mandé a mi clase. Que me gustan bastante porque es de un rol en el cual estoy. Que no entenderéis ni pizca, pero que más da. Creo que no tengo nada más que decir, a parte de que digáis que os ha parecido y que comentéis, aunque no lo haréis así que meh.
Besos y amor de bayas.


Entro en el despacho y cierro la puerta con el pie. Tiro la fina carpeta que llevo en las manos de haber corregido algunas cosas en el cuarto, y la tiro en la mesa a un poco de distancia. Me dejo caer sobre la silla, esta se balancea un poco, y suspiro pasándome las manos por el pelo. Que día.

No había dormido prácticamente en toda la noche, cuando no estaba dándole el biberón a Eric, estaba cambiándole los paños a Fel para que no le  subiera la fiebre. Y yo no estaba muy seguro de haber dormido más de media hora seguido. Para colmo, mi hijo había decidido no seguir durmiendo a partir de las cinco de la mañana, pero por lo menos se había confirmado con estar en medio de los dos en la cama, muy separada de Fel para que no le diera tanto calor o si no estar en mis brazos.

Felurian había conseguido dormir más que yo, pobrecita. Tenía que estar agotada de todo el día haciendo cosas y con el niño para arriba y para abajo y sabiendo que se estaba poniendo enferma. No había querido dejarla sola, pero ella había insistido que viniera a rellenar los papeles para entregárselos a la directora y que se apañaría una hora sin mí en el cuarto. Accedí solamente porque Eric se había vuelto a dormir y eso me dejaba más tranquilo sabiendo que no le daría la lata.

Me pongo derecho y extiendo las manos para acercarme a la mesa. Enciendo el portátil por si tenía algún nuevo correo y después de revisar todo lo apago. Cojo la carpeta que tiré antes y la dejo sobre el montón que siempre tenía de folios en el lado izquierdo. Frunzo el ceño al ver el sobre blanco que había bajo la carpeta y lo cojo dándole la vuelta. Tiene el sello de mi familia y no pone de quién es. La abro con cuidado y saco el folio desdoblándolo.

Querido Henry:

Espero que estéis bien. Aquí lo estamos, ya sabes mamá como siempre, llorando cada vez que viene algunos de los mayores con los niños y también cuando ve las fotos de Eric. En realidad te escribo esto por eso mismo. Sé que solo tiene muy poco tiempo, y bueno había pensado en pasar allí una temporada en el internado ya que por aquí hago poco y yo también necesito un descanso de Annie, desde que ha roto con la novia está más irritante que nunca. Que eso, que me enrollo, que te vayas preparando que en pocos días me tienes allí, seguramente antes de lo que te esperes, ya que no sé cuánto tarda esto en llegar a Polonia. ¡Y dile a Eric que le llevo muchos regalitos de todos! Y seguro que Fel está deseando de tener una chica cerca para ir de compras. Ay, que me voy a hacer las maletas. Buscaré una habitación cerca de la tuya para no recorrer mucho por allí. Espero que a la directora no le importe, que si hace falta te ayudo con las clases. Total, con todos los que hay ya allí…

Abrazos de hipocampos,

Emilie.


Sonrío mientras voy leyendo la carta y me levanto corriendo para volver a la habitación. ¿Para qué usar correo electrónico que era más rápido? No a ella le gustaba seguir mandando cartas. Seguramente estaría en la puerta esperando a que la recogiera, ya habría escuchado a través de mi cabeza que la había leído, ventajas de leer la mente. Doy gracias a los mares por que viniera y pudiera cuidar de Eric un par de horas y así se podría recuperar mejor Fel y yo dormir un poco más. Abro la puerta del cuarto y cuando voy a decirle a Fel que viene mi hermana, ya me encuentro a Emilie sentada en la cama con el niño encima.

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